Un gran remedio para un gran mal

Aún a siete años del atentado del 11 de septiembre no está claro quien o quienes fueron los responsables directos de tan cruento delito.

A pesar de que no se contaban con pistas fehacientes, en solo 24 horas los medios de comunicación y el gobierno de los Estados Unidos atribuyeron los hechos a la red Al Qaeda de Osama bin Laden, que sirvió de justificativo para invadir Afganistán.

Lo cierto es que apenas divulgada la culpabilidad de bin Laden, él mismo expresó un comunicado negando alguna responsabilidad.

El argumento irrefutable que se encontró para culpar a Bin Laden fue un video. A tan solo dos semanas de producida la tragedia del 11-S, los medios de comunicación de todo el mundo emitieron fragmentos de una filmación en el que se vinculaba al presunto autor del atentado con algunos líderes de la red Al Qaeda auto incriminándose.

Pero este video no es más que una representación complotista ya que muestra claras evidencias de haber sido editado. En algunas escenas se ve a bin Laden con un anillo en una de sus manos y en otras no, hay una marcada diferencia en la estatura con respecto al peso del protagonista, el sonido de las voces que se pueden percatar no son más que un bullicio excepto en los momentos en que presuntamente se auto incriminan al atentado y precisamente en ese momento se escucha un idioma árabe con deficiencias en la pronunciación.

Otro detalle llamativo es que en el tape se observa a bin Laden escribiendo en algunas ocasiones con su mano izquierda y en otras con la derecha y, por último un equipo independiente de periodistas alemanes comprobó que el video había sido mal traducido por los organismos de inteligencia estadounidenses.

¿Cómo pudieron escaparse tantos detalles? ¿No son acaso la CNN, la BBC y tantas otras agencias de noticias estrictas en su vocación de informar con precisión?

En este y otos casos no tan particulares es evidente que los medios de comunicación son estrictamente controlados por los centros de poder, los gobiernos y las logias.


Fuentes:

Hitler ganó la guerra – Walter Graciano
Nadie vio Matriz – Walter Graciano
“France Looks into Bin Laden Death Report”, www.washingtonpost.com/wp-dyn/content/article/2006/09/23/AR2006092300217_pf.html
“Oussama Ben Laden serait mort”, www.politique.com/forum/archive/index.php/t-380.html.

Natalio Marzorati