En nombre del amor

Instalada desde hace un tiempo en la escena musical, Ligia Piro llenó una vez más La Trastienda (Balcarce 460), para presentar su tercer disco Trece canciones de amor. En la segunda función del 14 de junio y junto a Ricardo Lew en guitarra, logró estremecer a un público que la conoce en su veta jazzera, pero que también aplaude sus nuevas incursiones.


Sin dudas es una de las voces más fuertes, perfectas y cálidas del país. En este nuevo trabajo Ligia dejó atrás las grandes producciones fotográficas, los escenarios glamorosos y los acompañamientos con multitud de músicos “tiene que ver un poco con el momento que está atravesando el país, este disco es un tributo a la amistad” cuenta desde el escenario envuelta en un vestido rojo color amor, que es el código de estas trece canciones.

Chasquidos de dedos retumban para dar pie a The way you look tonight, luego una versión magnifica de Moon River, canción que hizo famosa Audrey Hepburn en desayuno en Tiffany’s.

Change the World de Clapton es uno de los temas preferidos de la cantante y además el track número cinco del disco, que también incluye una hermosa versión de Isn’t she lovely de Stevie Wonder, donde le toca lucirse a Lew como arreglista.

En cuanto a ella, extasía al publico con Over the rainbow, canción que trae desde la infancia y que con afinación exacta acompaña a una interpretación magistral.

En una segunda etapa, se sumaron al dúo Daniel Maza en el bajo y Daniel “Pipi” Piazzolla en batería. Con ellos, el concierto empezó a ser más electrizante y se permitió otras licencias en cuanto a la pauta del amor. Entraron temas de Vinicius de Moraes, que Ligia tanto domina y también estuvo lo local con Bajo el sauce solo, la zamba de Leda Valladares y una magnífica interpretación de Barro, tal vez, de Spinetta.

“Me estoy alejando un poquito del jazz” confiesa.
Tenés permiso, nena.

Sol Gosetti